domingo, 14 de marzo de 2010

Y vuelo, vuelo alto y el viento que levanto me sabe a verano, a sol, a noche, me sabe a las hogueras que enciendo, me sabe a las olas que me tocan, que se van y vuelven.
Me sabe a ese vaivén justísimo que dice que si no saltas una las siguientes tardan un solo segundo en llegar.

Ahora estoy en la orilla y se me acercan.
La primera me trae un olor a mar purísimo y se me pega a la piel en un abrazo libre y salado.
La segunda parecía retirarse vencida pero llega y me lame los pies codiciosa y abierta.
La tercera me fue invisible hasta que me salpicó la cara y me despertó hambrienta y fantástica.

Las olas que me envuelven también me marean, también me calman, me alcanzan me inspiran, me desnudan y alguna me logra.

Cuál de ellas me cure me lo susurrará el tiempo, el mismo que no tenemos el mismo que no te cedo, el que me sirve para curarme el que me dice que la orilla del mar está rebosante de imágenes, momentos, caricias, huídas, recuerdos y otros bálsamos para olvidar.

2 comentarios:

RISAS dijo...

m encanta tu fto d principal y x certo m kedare sentao esperando encontrar lo k deseo, peo lo malo esk tu no vas venir...jejeje XD XD
un besazo wapa

Myself dijo...

interesante, Srta. Livana...

me pasaré a menudo por aquí pues! =)